Adviento: la Luz verdadera permanece. San Máximo de Turín
Mirémonos con sinceridad ¿Hemos nacido realmente de nuevo del Agua y del Espíritu? ¿El signo del bautismo ha sido efectivo en nosotros? ¿Somos cristianos que viven soportado el yugo del mundo, pesado y amargo, por miedo a la Luz? ¿Tememos el yugo de Cristo, que es liviano?
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