Francisco recibe a la muy «progre» arzobispesa luterana de Suecia y le pide defender vida y familia
Esta denominación, que hasta el año 2000 era la oficial y estatal en Suecia, suele considerarse la mayor de las iglesias luteranas, declarando 6,4 millones de miembros, aunque muy pocos de los bautizados en ella acuden a sus templos.
El Papa fue amable y muy cordial, como es siempre su costumbre, pero presentó a la visitante temas que resultan incómodos para esta iglesia, de las más liberales del mundo, como la defensa de la vida y la familia.
En Suecia, por ejemplo, sólo los católicos y algunos evangélicos de tipo carismático se atreven a hablar contra el aborto. La reciente y jovencísima líder del partido democristiano, Ebba Busch Thor, de 28 años, que de niña fue a la escuela de la iglesia carismática Livets Ord, ha recibido durísimas críticas simplemente por defender el derecho a objeción de conciencia del personal sanitario ante el aborto, algo que recoge la ley de aborto de 1974 pero que las instituciones torpedean cuatro décadas después. (El partido democristiano suele obtener entre el 4% y el 6% de los votos, bastante para obtener algunos escaños que pueden ser importantes en coaliciones).
La Iglesia luterana no participa nunca en la denuncia del aborto. En este ambiente, las palabras del Papa Francisco resonaron de forma peculiar: "Es de urgente actualidad la cuestión de la dignidad de la vida humana, que se debe siempre respetar, así como lo son las temáticas de la familia, el matrimonio y a la sexualidad, que no pueden ser calladas o ignoradas por temor a poner en riesgo el consenso ecuménico ya logrado. Sería un pecado si en estas importantes cuestiones se consolidaran nuevas diferencias confesionales", afirmó el Papa ante la jerarca luterana... sabedor de que las diferencias confesionales ya están ahí, y muy grandes.
La arzobispesa de una iglesia "progre"
Antje Jackelen fue elegida azobispesa de Uppsala (y, por lo tanto, Primada de la Iglesia luterana de Suecia) en 2013 con el 56% de los votos. Para entonces, ya había declarado en el periódico cristiano "Dagen" que el parto virginal de María "es un término mitológico para explicar lo único, aquellos que interpretan el parto virginal como un asunto biológico no entienden de qué se trata".
Siempre fue militante a favor del matrimonio homosexual: en un artículo de 2009 en Svd.se, respondiendo a protestantes conservadores, afirmaba: "Jesús dijo muy poco sobre sexo y matrimonio. Decir que el matrimonio es algo ordenado por Dios no significa que el matrimonio tenga una forma concreta de una vez para siempre. La historia nos muestra que no ha sido así. La creencia de la Iglesia Sueca es que el matrimonio es un don de Dios para ayudar a una pareja a vivir el amor y la fidelidad mútua. Según la tradición luterana, el matrimonio es una cosa mundana".
La Iglesia luterana sueca empezó a realizar ceremonias matrimoniales del mismo sexo ese mismo año de 2009.
De hecho, Jackelen, casada con un pastor luterano, con dos hijas y varios nietos, es aún "tibia" comparada con la obispesa de Estocolmo, Eva Brunne, lesbiana militante "casada" con otra pastora luterana.
La ruptura y la unidad
La arzobispesa Jackelen centró su discurso en el Vaticano en alabar el papel del Papa como líder espiritual de más de mil millones de católicos y su función "fundamental para la justicia y la reconciliación". También mencionó las celebraciones de los cinco siglos de la reforma luterana que se celebran en 2017, que el Papa aprovechó para remitirse a unos documentos conjuntos que teológos de la Iglesia católica y de entidades luteranas están preparando, deseando "con la ayuda de Dios y nuestra colaboración con Él y entre nosotros, ulteriores pasos en el camino de la unidad". El Papa también agradeció que la arzobispesa mencionase a su amigo el pastor protestante Anders Root, que, dijo, "me ha ayudado en la vida espiritual".
El origen de la Iglesia luterana sueca: un rey
El rey Gustavo I de Suecia creó su propia iglesia nacional luterana, en 1526, la Svenska Kyrkan, confiscando las propiedades católicas. Desde entonces, todo el país se consideró luterano. En 2013, sin embargo, las estadísticas constataron que por primera vez ni la mitad de los bebés nacidos ese año eran bautizados en esta iglesia, donde se dan más fallecimientos que nuevos ingresos. En 1972, la Svenska Kyrkan implicaba al 95% de la población del país. Hoy no pertenecen a ella ni el 66% de la población. Suma apenas 6,4 millones de miembros, aunque sólo un 2% de ellos van a los oficios religiosos con regularidad. (En España, un 20% de los católicos va a misa al menos un par de veces al mes).
Según la revista evangélica Varlden Idag, en 2013 71.693 personas dejaron oficialmente esta iglesia, según sus detalladas estadísticas. En 2009 -el año que se consagró obispesa la activista lesbiana Eva Brunne- se fueron 73.000 personas; en 2012 algo más de 53.000.
Como hemos explicado, la iglesia luterana sueca -la Svenska Kyrkan- ni condena ni combate el aborto. Es un país con aborto libre y gratuito desde 1975 y una educación sexual obligatoria y sistemática que no ha impedido que las adolescentes suecas sean de las que más abortan de Europa (22,5 casos cada mil chicas de 15 a 19 años en 2009). De 2000 a 2010 el aborto pasó de 30.000 a 38.000 casos anuales.
La Svenska Kyrkan tampoco evangeliza. Ordena mujeres como sacerdotisas porque así lo impuso el Parlamento de Suecia en 1960. Hace ceremonias de uniones gay desde 2007, y bodas gays religiosas desde 2009.
Los vecinos escandinavos, las iglesias luteranas de Dinamarca y Finlandia, igual de liberales, tampoco crecen: están estancadas en unos 4,5 millones de fieles cada una, y a la baja. Y en Alemania, desde 2009 hay más católicos que luteranos, no porque el catolicismo crezca espectacularmente -se mantiene en unos 25 millones de fieles-, sino porque el luteranismo pierde fieles por demografía (fallecimientos) y desinterés.
Suecos que se hacen pentecostales o católicos
Los suecos que dejan la Svenska Kyrkan, en su mayoría, simplemente se quedan en casa. Otros, los que buscan una fe viva, van a iglesias evangélicas y pentecostales como Livets Ord, fundada por el pastor Ulf Ekman (¡antes de hacerse católico!).
Otros, como Lars Ekblad, que fue pastor luterano 40 años, se hacen católicos. No han sido muchos hasta ahora, pero podría cambiar. "Yo conozco muchos ministros de la Iglesia de Suecia que se han hecho católicos y vendrán más aún. Cada uno tiene su propio camino", declaraba Lars Ekblad a ReL hace unas semanas.
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