El Papa Francisco recibió a Bachelet, la mandataria socialista que quiere imponer el aborto en Chile
La audiencia se desarrolló en la biblioteca del Palacio Apostólico durante cerca de 45 minutos. La Sala de Prensa informó que “en el curso de las conversaciones, que se han desarrollado en una atmósfera de cordialidad, se ha hablado de las buenas relaciones bilaterales y se ha manifestado el deseo de que se refuercen todavía más en el marco de los instrumentos jurídicos previstos del derecho internacional”.
Asimismo, “se han analizado temas de interés común, como la salvaguardia de la vida humana, la educación y la paz social”.
“En ese contexto, -continua la nota oficial del Vaticano- se ha reafirmado el papel de las instituciones católicas en la sociedad chilena y su contribución positiva, especialmente en la promoción humana, en la formación y en la asistencia a los más necesitados”.
Bachelet presentó el 31 de enero un proyecto de ley para despenalizar el aborto en tres causales: inviabilidad del feto, riesgo de vida de la madre y violación. La propuesta legislativa, que será alcanzada al Congreso del país, incluye el aborto para menores de 14 años.
Luego del encuentro con el Papa, Bachellet se reunió con el Secretario de Estado Vaticano, Cardenal Pietro Parolin; y con el Secretario para las Relaciones con los Estados, Paul Richard Gallagher.
Posteriormente, la mandataria estuvo en la conferencia de prensa en las cercanías de la Plaza de San Pedro. Dijo que en la conversación con el Papa se trató sobre la manera de continuar trabajando en Chile para conseguir las máximas oportunidades y derechos de los ciudadanos. “El Papa Francisco es un pastor muy humano que conoce muy bien la región”, afirmó la Presidenta.
Bachellet también aseguró que hablaron sobre los cambios que se están realizando en Chile y del papel de los gobernantes.
Sin embargo, evitó responder a las preguntas de la prensa, entre ellas si en el encuentro privado con el Papa se conversó sobre la ley del aborto que su gobierno pretende aprobar.
Bachellet anunció también que el Santo Padre se mostró muy favorable a una posible visita al país. Aunque no tiene todavía fecha específica, lo más probable es que se produzca en 2016 aprovechando que viajará a Argentina y Uruguay.
Mientras se realizaba la audiencia privada, en la Plaza de San Pedro un grupo de las Mujeres de Blanco, junto a hombres y niños provenientes de Chile y de Italia, se manifestaron contra del proyecto de ley de despenalización del aborto y rezaron para que no sea aprobado en el país.
El nuevo proyecto abortista de Bachelet incorpora a menores de 14 años, en cuyo caso el límite para abortar sería a las 18 semanas de embarazo. Según su propuesta, aunque las menores de 14 años deben actuar bajo la autorización de su representante legal, “en caso de diferencias con sus representantes, se establece la posibilidad de la menor de acceder al juez de familia para obtener su pronunciamiento”.
El proyecto incorpora además la posibilidad de que los médicos puedan expresar su objeción de conciencia, pero deben “informar de forma oportuna cuando una paciente se encuentra en alguna de estas causales”.
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