Francisco visita por sorpresa un centro de atención a enfermos de sida atacado por el lobby gay
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Francisco partió desde la sede de la Nunciatura a las 15:56 (hora local) y llegó en pocos minutos a la Fundación San Rafael, distante a unos dos kilómetros de la sede diplomática. Desde su llegada, el Papa saludó a los fieles que se agolpaban en la zona.
El Santo Padre fue recibido por el padre Aldo Trento en la entrada misma de la Fundación, para luego ingresar a la institución en donde permaneció unos diez minutos aproximadamente.
En declaraciones a los medios, indica el diario ABC de Paraguay, el padre Trento dijo que el Papa Francisco lo animó a continuar con su importante tarea: "Seguí adelante, padre", le dijo.
El activista Simón Cazal, cofundador de la ONG Somosgay y principal promotor del lobby que busca la legalización de las uniones homosexuales en Paraguay, dijo recientemente que el sacerdote que dirige la Fundación San Rafael, el padre Aldo Trento, es “espantoso” y que “mientras antes se muera, mejor”.
En el programa radial Maldición Será Un Día Hermoso del 15 de mayo, Cazal dijo además -sin prueba alguna- que el padre Trento suspende a los enfermos su medicación asegurándoles que Dios los curará, y calificó la clínica que dirige como “un ‘sidatorio’, un lugar al que la gente se va a morir”.
Sobre su posible participación en el encuentro que el Pontífice sostendrá esta tarde con los representantes de la sociedad civil en Paraguay, Cazal aseguró en esa oportunidad que “no es una prioridad” para su colectivo gay “atenderle al Papa”.
Las acusaciones e insultos de Cazal contra el padre Trento provocaron un rápido rechazo en la prensa local. El periodista Juan Manuel Salinas, que conoce y ha entrevistado repetidamente al activista gay, lo calificó de mentiroso y de “nazi homosexual”.
El periodista paraguayo indicó también al activista gay que el padre Trento “al que vos le deseaste la muerte, ha atendido a travestis y prostitutas. Incluso, había una travesti que llegó a vivir en la Fundación, ayudando al cura en su labor. Una travesti a la que muchas personas, incluyendo su propia familia, le habían dado la espalda”.
El padre Aldo Trento también salió al frente de las acusaciones del activista gay, y aseguró en un video subido a YouTube que “yo le perdono (a Cazal)”, y señaló que “la clínica es una obra muy bella y que está hecha solamente para los pobres que normalmente tienen enfermedades terminales, tanto de sida, como también de cáncer y de otra enfermedad”.
La Fundación San Rafael que dirige el sacerdote no se queda en la clínica de cuidados paliativos sino que tiene una granja para los enfermos de SIDA que se han recuperado, además de tres casas para niños abandonados -una de ellas para adolescentes víctimas de violación en sus hogares- y tres casas para ancianos.
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