Cuidado con el Cristo de Rio de Janeiro: su obispado pide 7 millones a la RAI por usarlo en un vídeo
A la RAI no se le ocurrió otra cosa que hacer un fotomontaje en el que la inmensa escultura aparecía ataviada con la camiseta de la selección italiana de fútbol para realizar un anuncio publicitario.
La televisión pública del país transalpino ha topado con la Iglesia. Los obispos de Río creen que el caso merece una reparación, y no sólo moral.
Eso sí, la jerarquía eclesiástica mirará para otro lado si la cadena se aviene a pagar entre cinco y siete millones de euros en concepto de indemnización.
La imagen de Jesucristo, aparte de devoción, también suscita reclamaciones por derechos de autor. La Iglesia de Río considera un ultraje la explotación de Cristo con fines comerciales, si bien todo se puede arreglar con dinero. Si la RAI desembolsa la cantidad exorbitante, la archidiócesis olvidará el agravio y dirá eso de pelillos a la mar.
"Es como si una televisión brasileña utilizara mulatas y gladiadores en el Coliseo de Roma para promocionar su programación. Es un insulto a un símbolo nacional", alega el abogado italiano Alexandro Maria Tirelli, que defiende los intereses de la jerarquía católica en el litigio.
Según publica el diario ´O Globo´, la institución eclesial es propietaria en exclusiva de los derechos de autor, "materiales y morales", del monumento". Puestos a pasar el cepillo, se hace bien o no se hace.
El letrado se ha puesto al habla con los directivos de la RAI y éstos se han apresurado a retirar el anuncio, lo que no es óbice para que la archidiócesis se mantenga en sus trece y exija mucha pasta a la televisión por apropiación indebida.
No se sabe si el leguleyo conseguirá su propósito, pero por de pronto ha encontrado el eslabón perdido entre la Iglesia y la SGAE en sus buenos tiempos.
Por supuesto la Iglesia destinará el dinero a una buena causa y hará caridad para atender a los menesterosos. A los obispos no les mueve el lucro, según dicen.
Una conocida marca de ropa deportiva planteó a la jerarquía eclesiástica vestir al Cristo Redentor con una de sus camisetas a cambio de dos millones de dólares y la Iglesia dijo que ni hablar. Eso es al menos lo que dice el abogado.
A los obispos, sin embargo, no les parece un oprobio que la estatua se ilumine de verde y amarillo, los colores de la bandera brasileña, cada vez que juegue la selección de Brasil en la competición.
La iniciativa es fruto de un acuerdo entre el obispado y la Compañía Municipal de Energía e Iluminación (RioLuz).
De esta manera, unos trescientos proyectores con tecnología led alumbrarán el monumento, el más visitado de la ciudad por los turistas.
Si se hace uso de la electricidad, lo mejor es no enredar demasiado. En febrero la estatua perdió la punta de un pulgar por culpa de un rayo.
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