Sesenta abortorios, denunciados por encubrir sistemáticamente abusos sexuales a menores
En su informe The Child Pretador Report , Life Dynamics señaló que “con la información que tenemos ahora, es simplemente innegable que Planned Parenthood y la Federación Nacional del Aborto han hecho una decisión consciente de ocultar la explotación sexual de niñas y proteger a los hombres que cometen estos crímenes”.
“Hemos descubierto un cuerpo abrumador de evidencia estadística mostrando que la tasa a la que estas dos organizaciones fallan al cumplir con las leyes, que obligan a informar, excede el 90 por ciento”. Estos datos, indicó el organismo pro-vida, “fueron obtenidos de fuentes del gobierno, publicaciones médicas, investigadores independientes y la propia industria del aborto”.
Entre los 60 casos figuran el de Dwayne Bruce Lee, quien en 1998, cuando tenía 35 años, comenzó a abusar de la hija de 8 años de su pareja. “En 2001, Lee sospechó que ella podía estar embarazada y la llevó a Planned Parenthood para una prueba de embarazo. Cuando se descubrió que ´Betty´ (seudónimo para la niña) tenía cuatro meses de embarazo, Lee la llevó a otro lugar para un aborto. Está claro que ni Planned Parenthood ni la clínica de aborto sin nombre realizaron un informe, ya que Lee continuó violando a Betty casi diariamente. Paró muchos años después, cuando fue encarcelado por violar su libertad condicional en un caso no relacionado”.
En otro caso, Douglas Wayne Ring, de 47 años, violó a una niña con el seudónimo de “Wilma” desde que tenía 8 años hasta que cumplió 20, ocasionando tres embarazos. “A la edad de 16 años, Ring la obligó a tener un aborto en un Planned Parenthood en el área de Houston. Dado que el abuso continuó por muchos años después, es claro que la oficina de Planned Parenthood no realizó un informe”.
Informes como estos, relacionados con Planned Parenthood y con otras organizaciones abortistas de Estados Unidos suman los 60 recopilados por Life Dynamics.
Investigación telefónica
La organización pro-vida realizó además una encuesta, en la que llamó a más de 800 sedes de Planned Parenthood y la Federación Nacional del Aborto. La persona que llamó fingió ser una menor de 13 años que había quedado embarazada por su novio de 22 años y que quería tener un aborto.
Life Dynamics subrayó que “en cada llamada las edades de la chica y su enamorado quedaron perfectamente claras. Se dejó claro también que la motivación para el aborto fue esconder esta actividad sexual ilícita de los padres de la chica y de las autoridades”.
“A pesar de que muchos trabajadores de la clínicas abiertamente dijeron a la persona que llamaa que esta situación era ilegal y que a ellos se les requería informar al estado, una abrumadora mayoría rápidamente aceptó esconder esta ilegal actividad sexual”.
Algunos de los trabajadores, señaló el informe, “incluso entrenaron a nuestra persona sobre cómo evitar la detección, cómo eludir las leyes de participación parental y qué decir o no decir cuando llegaran a la clínica. En un significativo número de instancias, ella fue alentada a mentir -o esconder- su edad o la de su pareja, o a dar nombres falsos”.
Life Dynamics advirtió que “durante estas llamadas no fue poco común que los representantes de Planned Parenthood o la Federación Nacional del Aborto advirtieran a la persona que llamaba de que si alguien se enteraba de esta situación, su pareja iría a la cárcel. En esas situaciones, era inequívoco que estaba siendo instruida para ser más cuidadosa sobre qué información ella daba y a quién”.
En su informe, Life Dynamics concluye que “en términos prácticos, la industria del aborto de Estados Unidos ha decidido volverse cómplice pagado de los pedófilos y pervertidos sexuales que apuntan a chicas menores de edad”.
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